sábado, diciembre 11, 2010

Pieles, trenzas y la Navidad

En Suecia, y por analogía supongo que en Noruega/Finlandia/Dinamarca de golpe entiendes muchas cosas:

- El tema pieles (se que va a ser un tema controvertido este...)

Mis peluditos. Menos los guantes, todo de 2a mano.
Todo el que me conoce bien sabrá que me encantan los bichos; que prefiero los perros a los humanos, pero...

Un días vas por la calle a -17ºC, hace viento, nieva, te ha entrado agua en el zapato y FLAS!

Entiendes, comprendes, abrazas la idea de despellejar un zorrito y hacerte un gorro.
O unos guantes, o unas botas con él.

También vale la idea de meterse entero dentro de un reno e ir calentito.
Omar (egipcio, por cierto) me comprendería.








No está bien, no. No mola matar animales, pero esto es así.

(Residentes en Rusia, sé que vosotros me comprendéis).










- Las trenzas

Sueca muy cuca ella con sus trencitas.
La imagen típica de la sueca en su hábitat natural -que no son las playas de Málaga, no- corresponde a una chica rubia de azulísimos ojos peinada con dos trenzas.

¿Y por qué se peinan así os preguntaréis? 

Pues porque cuando llevas un sombrero, o puede que un gorro y la capucha encima y posiblemente también unas orejeras porque hace un frío infernal (paradoja de expresión, by the way), es la única manera de lucir decentemente.

O sea, de ir peinada mientras llevas el gorro, y más importante aún, cuando te lo quitas.



- La falta de cortinas

Vista desde mi cocina: os veo a todos!
Por defecto profesional empezaré este asunto con la siguiente afirmación: QUE EXPORTABLES SON LAS PERSIANAS! 

Y ahora al tema...

Cuando sólo tienes luz de 9h a 3h tu mayor deseo es abrazar dentro del hogar los rayos del astro rey.

O dicho menos poéticamente: a nadie se le ocurre protegerse del sol.

¿Por qué?

Porque no lo hay.







- Navidad exacerbada

Durante el mes de diciembre los días se hacen cada vez más cortos. Entras a currar que es de noche y sales que vuelve a ser de noche.

Plantita de Navidad y uno de mis gorros faux fur.
Así que entiendo que el tema de la Navidad y sus luces y sus rojo y sus velas, no es tan religioso como nos han vendido, tampoco tan consumista, no, no.

Es un tema de supervivencia: o pones lucesitas parpadenates, rojos luminosos y velas centellantes en tu vida, o te tiras al lago harto de tu miserable existencia.

Así que sólo puedo añadir lo siguiente: Gracias Coca-cola por cambiar el vestido de Papa Noel, el rojo es mucho más alegre que el original verde.

2 comentarios:

  1. jajjajaa me encantan tus apreciaciones

    "Entiendes, comprendes, abrazas la idea de despellejar un zorrito y hacerte un gorro.
    O unos guantes, o unas botas con él." :D!!

    ResponderEliminar
  2. O meterte dentro de un reno...jajajaja. Leer tu blog me sirve para resarcirme de no estar allí pasando frío intentando cobijar mi cráneo con un faux fur

    ResponderEliminar